Por: José Miguel Mena Director de Servicios Jurídicos ClarkeModet México
Desde 1994, con la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la región de Norteamérica ha sido, sin duda alguna, una de las regiones comercialmente más competitivas y con mayor dinamismo en el mundo. En particular para México, el TLCAN fue el instrumento legal que impulsó la transición del país a un modelo económico abierto, moderno, competitivo y de libre mercado a partir de la eliminación de aranceles y del aumento en las exportaciones locales dentro de la región, resultando en una mayor inversión extranjera y el completo aprovechamiento de su localización geográfica estratégica.
La era del TLCAN ha terminado con la entrada en vigor del nuevo Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC); sin embargo, el nuevo tratado no solo apunta a continuar la exitosa relación comercial entre las naciones a partir de las bases establecidas por su antecesor, sino que ha sido actualizado en atención al enfoque y necesidades actuales del comercio, en el que la innovación tecnológica, el entorno digital y la propiedad intelectual se han vuelto de coyuntural importancia.
Por ello, quienes deseen realizar negocios en México, podrán beneficiarse de las siguientes novedades:
1) Más privacidad y ciberseguridad
Precisamente, el T-MEC es un pionero dentro de los de su especie ya que es el primer tratado internacional que reconoce que -ante los grandes avances tecnológicos- la economía tradicional se ha transformado por completo y, en consecuencia, es el primero que contempla un capítulo exclusivo para el comercio digital, dentro del cual se destacan disposiciones importantes como: el fortalecimiento a la protección de datos personales y a los consumidores en línea, la prohibición de aranceles a la importación o exportación de productos digitales, la no discriminación de firmas electrónicas y el desarrollo de colaboración entre las partes para la mitigación inmediata de incidentes y amenazas de ciberseguridad.
2) Mayor equilibrio entre pymes y grandes empresas
Esta precursora visión determinada por el nuevo tratado impulsa la economía en internet, acelera la digitalización de las naciones, diversifica el comercio y, sobre todo, sienta las bases de un ansiado equilibrio de la competencia entre pymes y grandes empresas facilitando a los negocios de cualquier industria y de cualquier tamaño la incursión en mercados internacionales a partir de transacciones transfronterizas prácticamente desde su nacimiento.
3) El e-Commerce, el gran protagonista
Así lo anterior, los empresarios que deseen hacer negocios en México deben considerar el e-commerce como uno de los ejes rectores de sus negocios, confiados en que existen esfuerzos legislativos y judiciales para la completa modernización del marco jurídico en el ámbito del comercio electrónico, lo cual les facilitará un crecimiento exponencial de sus actividades a ritmo del entorno digital, pero sin comprometer su seguridad jurídica.
4) Un nuevo (y reforzado) marco regulatorio de la Propiedad Industrial e Intelectual
Aunado, este nuevo acuerdo trilateral establece nuevos y refinados estándares de protección y defensa de derechos de propiedad intelectual (PI), los cuales definitivamente fortalecen el régimen jurídico de PI en México incluyendo una revisión detallada de la protección de todas las figuras, tales como marcas, patentes, derechos de autor y conexos, diseños industriales, indicaciones geográficas y secretos industriales.
Acompañado de reglas claras, modernas y homologadas en el trámite y protección de estos derechos, el T-MEC también compromete a las partes a robustecer sus procedimientos de observancia de derechos de PI facilitando el resarcimiento de daños y perjuicios ocasionados por la violación de sus derechos y reforzando los procedimientos y las medidas en frontera para detectar, interrumpir y, en su caso, sancionar de manera expedita la importación de productos falsificados, lo cual definitivamente crea un ambiente de confianza y seguridad jurídica óptimo que fomenta la innovación y desarrollo tecnológico, así como la actividad empresarial para todo tipo de industrias en nuestro país.
5) Falsificaciones y piratería, en el punto de mira
Cabe destacar que, con la entrada en vigor del T-MEC, se realizaron cambios sustanciales en el régimen de PI en México ya que, el mismo 1º de julio que entró en vigor el nuevo tratado, también se publicó la nueva Ley Federal de Protección de la Propiedad Industrial, así como reformas importantes a la Ley Federal de Derechos de Autor y al Código Penal Federal, con el fin de generar el marco jurídico adecuado que permita cumplir con los compromisos asumidos y combatir uno de los problemas más grandes inmersos en la economía nacional: la falsificación y la piratería.
Si bien México tiene un alto índice de falsificación y piratería, el Gobierno Mexicano reconoce que el incremento de la inversión extranjera, es directamente proporcional al nivel de protección de los derechos de PI y, por lo tanto, ha realizado cambios importantes para fortalecer su sistema; sin embargo, es indispensable que las empresas que pretendan hacer negocios en México, desarrollen estrategias de protección, monitoreo, defensa y monetización de sus activos intangibles antes de establecerse.
6) La seguridad jurídica en México, una ventaja que aprovechar
Finalmente, considerando que México es un país que brinda seguridad jurídica en los negocios, que es respetuoso de los acuerdos internacionales, que cuenta con uno de los sistemas de PI más sólidos y modernos en el mundo y que tiene una ubicación geográfica privilegiada la cual proporciona la posibilidad de interactuar directamente con la economía más grande del mundo con ventajas comerciales exclusivas, es dable concluir que -hoy más que nunca- México es un destino comercial atractivo con un terreno fértil para el establecimiento y el crecimiento de negocios, virtualmente, en todas las industrias.